Luego de dos años de espera, ésta terminó!

La tercera temporada de Sherlock se estrenó el 1° de enero en el Reino Unido (es más, este 12 de enero se transmitió el último episodio) y su primer capítulo fue visto por algo más de 12 millones de televidentes, sin contar la gente que lo vimos vio por medios menos oficiales (re: streaming, para aquellos que no somos capaces de aguantar hasta la fecha oficial para Latinoamérica).

Escrito por Mark Gatiss, ‘The Empty Hearse’ marcó el regreso de la aclamada serie de la BBC a las pantallas de millones de personas que tuvieron todo este tiempo para elaborar sus teorías sobre cómo Sherlock logró evadir lo inevitable, para volver a caminar entre los vivos.  

A diferencia del talante de las dos primeras temporadas, donde el caso en el que está trabajando Sherlock suele ser el elemento principal en la narración, ‘The Empty Hearse’ se siente más como una bienvenida retrasada por mucho tiempo.

Han pasado dos años, en la trama, y la vida sin Sherlock siguió adelante para todos aquellos relacionados con nuestro detective consultor.

Holmes no es una persona de afectos ni sentimentalismos, eso queda más que claro en los primeros seis episodios de la serie. Sin embargo, es al volver de tan larga ausencia donde vemos lo mucho que la experiencia vivida lejos de John Watson, Lestrade, la Sra. Hudson, Molly, e incluso su “irritante e intrusivo” hermano Mycroft, lo ha cambiado.

Sherlock vuelve con una humanidad encontrada a la fuerza. Vuelve a atar cabos con las personas que terminaron ganando un lugar de importancia en su vida; y como es natural en él, en este tipo de situaciones que realmente no son su especialidad, lo vemos trastabillar, y aún más importante, lo vemos hacer progresos respecto a ello.

Éste primer episodio me resulta difícil de digerir todavía. La espera ha sido larga y encontrarse con un regreso que se siente como un regalo, hace que la expectativa frente a los dos que restan sea mayor, sea mucho más emocionante.

De igual manera, en el episodio vemos además la llegada de Mary Morstan, la ya conocida prometida del Dr. Watson (en ésta y en las demás adaptaciones por ser parte de las historias originales), quien es una adición brillante y muy bien recibida a la dinámica de John y Sherlock. Es Mary quien actúa, en buena parte, como un catalizador para que el famoso dúo se reúna y trate de recuperarse del trauma que deja una separación como ésta.

Con muchas referencias al fandom, que han sido tanto aplaudidas como cuestionadas (y en el caso de quien escribe resultan en sonrisas y en elogios), así como la inclusión de más historias de Sir Arthur Conan Doyle y el tinte de comedia, que en ocasiones hace parte de la serie, perfectamente ejecutado por Benedict Cumberbatch y Martin Freeman, ‘The Empty Hearse’ es un regreso esperado por más de dos años en el que comenzamos a atar cabos.

El cómo Sherlock logró evadir lo imposible, un rapto momentáneo que no tiene claridad en sus motivos, y quién realmente es Mary Morstan son algunos de los interrogantes que nos regala este primer episodio y que, por lo que cuentan sus productores, actores, y equipo de producción, tendrán solución hasta el último capítulo de la temporada.